La Península de Alaska fue sacudida por el mayor temblor en 56 años, al registrar un terremoto de 8.2 de magnitud en la noche del miércoles 28 de julio del presente año, lo que ocasionó pequeñas olas en las costas.
El terremoto golpeó 91 kilómetros al sureste de la ciudad de Perryville, la ciudad más grande de Alaska, el cual ocurrió a las 10:15 pm del miércoles.
Debido a la magnitud, el Centro Nacional de Alerta de Tsunamis del gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de tsunami para el sur de Alaska y la península de Alaska.
Se advirtió sobre olas peligrosas, pero después de casi 3 horas la altura máxima detectada por el centro fue de ocho pulgadas y degradó las alertas de amenaza de tsunami a avisos. Se registraron cinco réplicas en los 90 minutos posteriores al terremoto, el mayor con una magnitud de 6.2.
De acuerdo al USGS, Alaska está situada en el “Cinturón de Fuego”, del pacífico, una zona con frecuente actividad sísmica en la que chocan las placas tectónicas.